Una vez más el Citroencuentro convocó a los fanáticos del 3CV

Colonia Caroya. Como ocurre cada año durante el fin de semana largo de octubre, los amantes de estos autos tan particulares se reúnen en nuestra zona. En esta oportunidad recorrieron distintos lugares de la zona, hubo muestras estáticas y visitas.

Los fanáticos del Citroën son incansables y cada año hacen todo lo posible por encontrarse y compartir momentos, ese es el motivo de fondo que logra reunirlos en nuestra zona.

Este año se realizó el 12° Encuentro Citronero del Norte de Córdoba que se concentró, como viene ocurriendo desde hace algunos años, en el Autódromo Caroya y desde allí partieron a distintos lugares.

La gran mayoría de los participantes tienen modelos 3CV y 12V, pero no faltaron los furgones, el Mehari y el Ami 8.

La marca francesa dejó de fabricar muchos de ellos hace casi 40 años, pero sin embargo siguen rodando sobre las rutas y calles de la Argentina.

La leyenda dice que si uno se encuentra con un Citroën y lo maneja por algunos metros, el hechizo tiene lugar y ya nada volverá a ser igual. Es justamente eso lo que les pasó a muchos de los citroneros, que no sólo aman su propio auto, sino que ofician de evangelizadores.

Así lo definió Dani Furgo, padrino del Encuentro, que estuvo participando junto a su esposa, como lo hace en distintas juntadas citroneras a lo largo del país.

También hay historias de amor que tienen un Citroën en el relato, como fue el caso de Franco y Mélani.

Un día descubrieron que el abuelo de ella tenía en el fondo de la casa un Citroën 3CV “tirado” desde hacía 15 años. La particularidad del auto es que estaba pintado de todos colores porque se usaba para realización de algunas promociones callejeras. “Lo manejaba un payaso”, cuenta entre risas Franco.

“Si lo hacen arrancar se los regalo”, les dijo el dueño y así ocurrió.

Desde que el motor volvió a girar, los dos se sumaron a la magia citronera y recorren distintos encuentros donde exhiben el “Citroën Top”, como algunos lo llaman, y comparten buenos momentos con los demás fanáticos.

Así es este encuentro, una pequeña nación trashumante unida por el amor a estos pequeños y rudimentarios autos que cuentan historias pero también escriben nuevas aventuras todo el tiempo.

15-10-19