El milagro de Brochero | Camila visitó el Anfiteatro José Hernández

Jesús María.- “Me emocioné un poco” dijo Camila Brusotti, la adolescente que es considerada mundialmente como el segundo milagro del Cura Brochero. La joven sanjuanina recorrió las tribunas del recinto de la doma y el folklore y se mostró feliz de saber de la importancia del Cura Brochero en el Festival Mayor de América. Junto a su padre, recorrieron varias localidades de Traslasierra, antes de llegar a Colonia Caroya y Jesús María.
Por Natalia Balverdi
Camila Brusotti, de 15 años, junto a su papá Javier, este lunes recorrieron el Anfiteatro “José Hernández”, recinto del Festival de Doma y Folklore de Jesús María, fiesta gaucha que tiene como a uno de sus dos patronos al Cura Brochero, figura de quien ingresa al escenario “Martín Fierro”, durante las noches de festival.
Camila, invitada por “Beto” Giordano, productor del programa televisivo de Canal 8, “Caballos y Placeres”, aceptó venir a Córdoba desde San Juan, su provincia natal, para reencontrarse con Nicolás Flores, llamado “El Primer Milagro de Brochero”, a los fines de participar del rodaje de una mini serie sobre el cura gaucho.
Aprovechando su presencia en la provincia, recorrieron varias localidades que destacan la presencia de “El Primer Santo Argentino” (pues nació y vivió toda su vida en nuestro país; declarado Venerable por Juan Pablo II y Beato en 2013, en manos del Papa Benedicto XVI, consecuencia de dos milagros argentinos: Nicolás y Camila), tales como Cura Brochero en sí; Nono, donde visitaron a “Nico”; Villa Santa Rosa, donde está museo de la casa natal; Carreta Quemada; Colonia Caroya y Jesús María.
“Estoy muy emocionada. Ya he venido antes a Cura Brochero pero mucho no me acordaba. El sábado hemos estado con ‘Nico’- que es el primer milagro - en misa”, contó Camila, quien calificó a Nicolás como un amigo, a pesar de haberlo visto apenas unos minutos, cuando tenía once años. Hoy, pudo compartir con la familia de él y conocer mejor a aquel joven con quien comparte el sentir por José Gabriel del Rosario Brochero.
“Para mi Brochero es un héroe porque gracias a Dios y a la intersección de Brochero, yo estoy donde estoy. Y gracias a mis abuelos que pidieron por mí”, dijo Camila al ser consultada sobre lo que el Cura Gaucho significa para ella.
Con la mirada en el escenario, deslumbrada por la inmensidad del campo de jineteada, con su rosario en la mano y su padre como guardián, Camila, ríe y conversa.
“Acá no conocía nada. Me emocioné un poco porque ver tantas cosas y a Brochero en la entrada”, dijo sobre el Anfiteatro José Hernández, donde fue le entregaron un presente en nombre de la Comisión Directiva del Festival de Jesús María.
Javier, padre de la joven, se mostró agradecido con “toda la gente que nos ha recibido de la mejor manera, al equipo, a Beto que nos dio esta posibilidad de tener a los dos milagros juntos. Esa fue la parte más emotiva. La hemos pasado muy bien y es un placer haber podido hacer todo esto”, dijo a dos días de su llegada a Córdoba.
¿Qué es un milagro?
El periodista y productor que unió a los Milagros de Brochero, “Beto” Giordano, dijo que la idea no sólo surgió por razones periodísticas sino profundamente comprometido con las historias de Brochero, debido a que él también supo pedirle al Curita gaucho por la salud de su hijo, en algún momento de su vida.
Lo cierto es que hace tres meses se repensó la idea de realizar una mini serie sobre vida y obra de Brochero pero para eso era indispensable la participación de quienes alguna vez niños, le brindaron al Cura Gaucho la eterna gloria.
Los milagros, explica Giordano, son personas que la ciencia no logra explicar cómo sobrevivieron a episodios que pusieron a sus vidas en aparente etapa final pero que, tras documentación muy específica, insta al Vaticano a decidir si las vidas de esas personas fueron obra de un… santo.
“Se estudian historias clínicas, se hace seguimiento y presentan certificados que los brindan los profesionales de la salud. Los médicos la daban por muerta – a Camila - estuvo sesenta días en estado vegetativo, entonces se empieza a rezar. No hay método científico para justificar por qué están sanos”, explicó Giordano.
“Muchas carpetas llegaron al Vaticano con distintas gracias pero con título – de milagro – son dos”, dijo “Beto”, sobre Nicolás y Camila.
La historia de los milagros de Brochero
A sus ocho años de vida, Camila tuvo que atravesar una delicada situación de salud, consecuencia de violencia intrafamiliar, lo cual la llevó a permanecer en coma durante unos tres meses.
Ante la inminencia de la muerte, según explicaban los médicos que la trataban, San Juan entero, conmovido por la historia de la niña, emprendió una cadena de oración.
La fe llegó en forma de estampita del Cura Brochero, a manos de Marina y de Raúl, abuelos de Camila, los cuales pidieron al Cura Gaucho que le salvara la vida a su nieta, luego de enterarse de que José Gabriel le habría salvado la vida a un niño de Nono, Córdoba, Nicolás Flores.
El 28 de septiembre de 2000, a sus once meses de vida, Nico fue víctima de un accidente de tránsito que lo dejó en grave situación. Se le practicaron varias cirugías de cerebro y no dejaba de caer en paros cardiorrespiratorios. "Si son creyentes o hicieron alguna promesa, comiencen a cumplirla porque esto es un milagro", le habría dicho el médico de Nico a su familia.
Hasta que un día una imagen de Brochero llegó a manos de Osvaldo, padre del niño, quien suplicó al Cura que intercediera por la vida de su bebé. Poco tiempo después, Nico mejoró. A pesar de las lesiones que dejó aquel accidente, Nicolás hoy camina, habla, es un joven sano.
En el caso de Camila, la situación fue similar: la ciencia ya no tenía recursos y se habían comenzado a despedir cuando, un día, llegó el milagro y la niña despertó”por razones desconocidas”; según dijeron profesionales médicos.
En 2013, antes de viajar a Roma para asistir a la santificación del Cura Brochero, el abuelo de Camila contó: "Una vez tuve un monólogo con Brochero mientras Camila se moría y le dije que yo no lo conocía, que por qué había venido a mi casa… Pensé que si vino era porque quería que le pidiera algo, entonces le pedí por la vida de Camila, su recuperación, la fortaleza de mi esposa y la mía. Y Camila mejoró (…) Hoy estamos viviendo esto".
9 de septiembre de 2021